Por qué deberías adquirir habilidades en inglés pensando en la vida real

La mayoría de la gente, cuando quiere aprender inglés, tiene claro que lo que necesita es entrar en una clase. Conocer gente, tener un profesor y hacer deberes todos los días. Es lo mejor si somos personas disciplinadas para ir aprendiendo pequeñas destrezas y establecer los fundamentos en nuestro cerebro. Pero, ¿es absorbiendo conocimientos en clase como vamos a salir hablando inglés?

Hoy me gustaría hablarte de algo que no siempre habla; de las destrezas o las habilidades en inglés. ¿Verdad que una persona que tiene un título no necesariamente tiene que saber de algo? Al fin y a la postre, lo que importa es que sepa algo de la vida, que sepa moverse, y si además tiene unos conocimientos adecuados para el puesto, pues mejor todavía.

Aprendiendo habilidades en inglés en la calle

Muchos hablamos de aprender a hablar un idioma, pero no de lo que vamos a decir en esa lengua o del formato de lo que vamos a decir. Es decir, nuestro inglés debería ajustarse a situaciones reales, igual que nuestro español. Los que hablamos español no tenemos problema en mantener una conversación en nuestra lengua materna. Pero si nos dicen escribir una carta de presentación o escribir un currículo en inglés, dar una clase de 1 hora o escribir un texto especializado, pues mucha gente sabría hacerlo, pero no todos lo harían bien.

Necesitamos mejorar el vocabulario, pero también los estilos y las fórmulas propias de esos ámbitos. ¿De qué hablamos cuando nos referimos las habilidades y destrezas en un idioma? Por ejemplo, cosas prácticas que nos van a servir en la vida, en el día a día:

  • Escribir un e-mail en inglés. El mundo hoy se mueve a través del mundo online. Poca gente escribe ya una carta con su destinatario y su remitente, salvo en empresas y sitios oficiales. Esto es mucho más básico y útil que escribir un artículo de opinión o una carta postal formal.
  • Hacer una presentación de unos 15 minutos. Si soñamos con estudiar un máster o una carrera en el extranjero, tendremos que aprender esto. E incluso mucho más si tenemos pensado dedicarnos a la enseñanza o a la investigación.
  • Saber presentarse y conocerse: con esto podemos tener problemas incluso en español, pero es muy importante y no se aprende sólo con libros de texto. Se aprende viviéndolo de verdad, por ejemplo buscando gente para conversar en inglés, o yéndote a un congreso o a un taller práctico en el extranjero.
  • Aprender a intervenir en clase o plantear dudas: y no sólo hacer una pregunta simple, sino expresar algo más largo y complicado.
  • Tener un tema de conversación: poder hablar de música, de viajes, de tus aficiones y ser capaz de hacerlo con naturalidad y durante mucho rato. Es decir, tener tu propia personalidad en otro idioma.  
¿Cómo se practican todas estas cosas? ¡Pues viviéndolas! Y aunque se puedan simular muy buenas situaciones en clase, el objetivo final es que sepas hacerlo cuando salgas a la calle. Aprender una lengua sirve entre otras cosas para comunicarse y vivir. ¿No crees?